Uno no elige de quien enamorarse, uno siente de quien se enamoró, uno no elige cuando enojarse, uno siente cuando se enojó, y por lo tanto, como todo sentimiento, la felicidad no se elige, se siente.
La felicidad es sentirnos pleno, es ese instante en el que nada puede salir mal, es, como quien dice, "tocar el cielo con las manos".
La felicidad no hace mal si es sincera, la felicidad no se debe sentir ante la caída del otro, la felicidad es un sentimiento noble y puro y hay que mantenerlo siempre así.
Hay que saber encontrar la felicidad en pequeñas cosas, porque la felicidad verdadera siempre se esconde en el rincón más rebuscado. La felicidad puede ser la sonrisa de otro, puede estar al saborear una comida, al escuchar una hermosa melodía, al leer un libro, incluso vivir puede darnos felicidad...
La felicidad es algo tan amplio y pequeño a la vez, se sabe apreciar a la felicidad cuando se es triste, la felicidad va de la mano con la tristeza, la felicidad es el mejor momento de la vida, pero no hay que dejar que nos nuble la vista, porque la felicidad se siente, no se posee ni se elige... la única elección es aceptarla, la única posesión es cuando hay razón para ser feliz...
La felicidad es la única cosa por la cual vivimos, vivimos para ser felices, vivimos para intentar ser felices, vivimos para saber que es ser felices, vivimos por y para la felicidad...
Lucía G. 27/02/09
~Hace más de un año que escribí esto, como pasa el tiempo~
¡Feliz día mujeres!
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